Psicoanálisis es una herramienta especialmente diseñada para poder hablar con un profesional de todo lo que quiera, sin prejuicios, sin censuras. Esta forma de hablar, sumada a la escucha psicoanalítica profesional, posibilitan la interpretación psicoanalítica, método para acceder a pensamientos y hábitos que inconscientemente determinan la vida y la salud de las personas sin darse cuenta de ello.
Indicaciones del tratamiento Psicoanalítico
Psicoanálisis es una herramienta especialmente diseñada para poder hablar con un profesional de todo lo que quiera, sin prejuicios, sin censuras. Esta forma de hablar, sumada a la escucha psicoanalítica profesional, posibilitan la interpretación psicoanalítica, método para acceder a pensamientos y hábitos que inconscientemente determinan la vida y la salud de las personas sin darse cuenta de ello
Para psicoanalizarse no es necesario estar enfermo. Cualquier persona puede acceder al uso de esta eficaz herramienta y los motivos para comenzar un psicoanálisis son diversos. Algunas personas comienzan a psicoanalizarse frente a un síntoma o enfermedad, otras cuando sienten que quieren cambiar o mejorar algo en sus vidas, o cuando comienzan una nueva relación amorosa, o frente a un deseo sexual no tolerado, o simplemente para poder dar los próximos pasos que le toca vivir. En algunos casos es un éxito, tal como un ascenso profesional o un aumento salarial, lo que lleva a una persona a consultar a un psicoanalista, por la inquietud que genera y las nuevas responsabilidades que implica.
En general, en psicoanálisis uno aprende a gestionar las emociones y afectos que se van produciendo en el transcurrir de su vida, así como a manejar los conflictos internos con uno mismo que, de un modo u otro, se ven reflejados en su realidad laboral, familiar, amorosa y social.
El psicoanálisis es también una herramienta eficaz como tratamiento de afecciones psíquicas y emocionales tales como depresión, ansiedad, estrés, crisis de angustia, dificultades en el trabajo o el estudio, enfermedades psicosomáticas (infarto de miocardio, cáncer, úlcera gástrica, dermatitis atópica, lupus eritematoso, colon irritable, enfermedades autoinmunes), miedos y fobias, baja autoestima, inseguridad, Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), timidez, adicciones, hiperactividad, trastornos alimentarios y obesidad.